Director: Guy Ritchie
Año: 2009
NOTA: 7
Año: 2009
NOTA: 7
Nunca me ha parecido mal que el cine recupere clásicos siempre y cuando tengan cosas que aportar. A Guy Ritchie le ha dado por recuperar a Sir Arthur Conan Doyle y la jugada no le ha salido tan mal, al menos mejor de lo que algunos esperaban del director de Snatch y Lock & Stock. No se parece en nada de lo que ha hecho anteriormente y ha interiorizado bien las bases de los blockbuster para idear esta libre-adaptación del mago de la lógica y la deducción, Sherlock Holmes.
La primera de las cosas que conviene analizar de esta película es su grado de adaptación/invención/exageración. De la primera podemos sacar más cosas positivas que negativas. Al metódico inglés de Baker Street 221 B no se le recuerda por combates de boxeo pero sí que se vio obligado a aprenderlo. Ídem de lo mismo con las armas, que casualmente Doyle ya dejaba claro que era un gran espadachín. Tampoco sus disfraces y sin embargo era sabido que era bueno transformándose. Estas cosas que en un principio parecen chirriar con respecto al Sherlock que podríamos tener en la cabeza tienen su base literaria. ¿Cuál es el motivo de queja pues? Pues evidentemente el grado de exageración que le imprime Ritchie. Simples excesos que modernizan a un personaje que realmente no sabemos si necesitaba esos chutes de adrenalina y acción grandilocuente.
Algo parecido con la personalidad de su protagonista. Sherlock era un tío más bien tirando a solitario e introvertido que había hecho de la deducción y el análisis una ciencia. Pues bien, utilizando su brillante inteligencia, se lanzó a ayudar a gente. Aquí vemos a un Robert Downey Jr. metido en un Sherlock que respeta esa esencia pero que cae con demasiada facilidad en excentricidades y salidas de tiesto un poco innecesarias que pueden recordar más a un Tony Stark. El que sí me ha sorprendido es el Watson de Jude Law, el médico militar que recordaba está bastante bien reflejado y siempre disfruto de su presencia como contrapunto a su colega Holmes. Y me ha hecho gracia esas alusiones a su mala suerte con las mujeres. La que flaquea por momentos es mi idolatrada Rachel McAdams como Irene Adler, papel que se presume más importante de lo que veremos en las dos horas que dura la película y que no consigue cuajar como debiera. Mark Strong demasiado decente como Blackwood aunque en el fondo todos esperemos con ganas al Moriarty que solo asoma el morro en esta parte pero que Ritchie se reserva para la secuela de 2011.
Todo lo demás funciona a las mil maravillas. El Londres decimonónico está perfectamente ambientado, está bien rodada, la fotografía puede quitar el hipo por momentos, una música genial del maestro Zimmer y discurre sobre un montaje bastante decente que nos permitirá unir piezas de una manera un tanto especial (no exento de alguna trampa). Esto es Sherlock Holmes visto desde otra perspectiva, con un gran sentido del espectáculo y una facilidad bastante asombrosa para entretener. En su contra tiene que le sobran algunas explosiones y le faltan más minutos para investigaciones, giros y tramas enrevesadas. Si arregla eso, tendrá la trascendencia que le falta a esta.
Salu2!
PD: Y la mejora dependerá de quien sea Moriarty y qué haga.
PD2-Shonen: Rayleigh cruzándose a nado la Calm Belt; Minato tiene ganas de ownear Uchihas (y yo); ahora es Kanonji quien se mete con Aizen (Bwahaha); a leches limpias los Dragon Slayers (pero hará falta más); Mefistofeles confirma cosillas ya sabidas; ahora le tocará lucirse a Uranus; Toujou y Oga se desahogan (que empiece ya el partido joer!!).
La primera de las cosas que conviene analizar de esta película es su grado de adaptación/invención/exageración. De la primera podemos sacar más cosas positivas que negativas. Al metódico inglés de Baker Street 221 B no se le recuerda por combates de boxeo pero sí que se vio obligado a aprenderlo. Ídem de lo mismo con las armas, que casualmente Doyle ya dejaba claro que era un gran espadachín. Tampoco sus disfraces y sin embargo era sabido que era bueno transformándose. Estas cosas que en un principio parecen chirriar con respecto al Sherlock que podríamos tener en la cabeza tienen su base literaria. ¿Cuál es el motivo de queja pues? Pues evidentemente el grado de exageración que le imprime Ritchie. Simples excesos que modernizan a un personaje que realmente no sabemos si necesitaba esos chutes de adrenalina y acción grandilocuente.
Algo parecido con la personalidad de su protagonista. Sherlock era un tío más bien tirando a solitario e introvertido que había hecho de la deducción y el análisis una ciencia. Pues bien, utilizando su brillante inteligencia, se lanzó a ayudar a gente. Aquí vemos a un Robert Downey Jr. metido en un Sherlock que respeta esa esencia pero que cae con demasiada facilidad en excentricidades y salidas de tiesto un poco innecesarias que pueden recordar más a un Tony Stark. El que sí me ha sorprendido es el Watson de Jude Law, el médico militar que recordaba está bastante bien reflejado y siempre disfruto de su presencia como contrapunto a su colega Holmes. Y me ha hecho gracia esas alusiones a su mala suerte con las mujeres. La que flaquea por momentos es mi idolatrada Rachel McAdams como Irene Adler, papel que se presume más importante de lo que veremos en las dos horas que dura la película y que no consigue cuajar como debiera. Mark Strong demasiado decente como Blackwood aunque en el fondo todos esperemos con ganas al Moriarty que solo asoma el morro en esta parte pero que Ritchie se reserva para la secuela de 2011.
Todo lo demás funciona a las mil maravillas. El Londres decimonónico está perfectamente ambientado, está bien rodada, la fotografía puede quitar el hipo por momentos, una música genial del maestro Zimmer y discurre sobre un montaje bastante decente que nos permitirá unir piezas de una manera un tanto especial (no exento de alguna trampa). Esto es Sherlock Holmes visto desde otra perspectiva, con un gran sentido del espectáculo y una facilidad bastante asombrosa para entretener. En su contra tiene que le sobran algunas explosiones y le faltan más minutos para investigaciones, giros y tramas enrevesadas. Si arregla eso, tendrá la trascendencia que le falta a esta.
Salu2!
PD: Y la mejora dependerá de quien sea Moriarty y qué haga.
PD2-Shonen: Rayleigh cruzándose a nado la Calm Belt; Minato tiene ganas de ownear Uchihas (y yo); ahora es Kanonji quien se mete con Aizen (Bwahaha); a leches limpias los Dragon Slayers (pero hará falta más); Mefistofeles confirma cosillas ya sabidas; ahora le tocará lucirse a Uranus; Toujou y Oga se desahogan (que empiece ya el partido joer!!).
3 comentarios:
Henme aquí, más bibo que vivo.
Peli bastante resultona. Con respecto al cambio de estilo, sí que es cierto que rompe casi por completo con la imagen clásica del universo de Don Arthur y si uno es purista es complicado de asimilar (aunque vistas las recaudaciones no creo que la inmensa mayoría le haya dado muchas vueltas). Yo por mi parte no tolero lo de Moriarty. Es cualquier cosa menos un tío sofisticado y envuelto en la penumbra. Lo peor es que solo con eso ya justifican la secuela. Dichosas arcas de Jolibú.
Pero es una película muy bien realizada y bastante divertida y llevadera, usuaria de todos los ingredientes y recursos que atraen a la inmensa mayoría a las salas. Dentro de ese contexto, pues yo creo que cumple sobradamente.
Saludetes.
P.D. La mejor de este hombre es, para mi gusto, Lock & Stock. Si no la has visto apúntatela.
A mi me gusta como se salen de los tópicos cinematográficos, porque además el cine había creado un personaje que ya en sí no era tampoco el de las novelas.
Tiene cosas interesantes, aunque como dices, se pierde en las exageraciones en muchas ocasiones.
Eso sí, como a Kururin, lo peor me parece Moriarty.
Kururin. Sí, está claro que lo de Moriarty olía mal desde el momento en que Blackwood no salía de escena. La famosa mano que controla desde las sombras que extrañamente no pegaba con el personaje como bien dices y que descaradamente se guardan para la secuela porque ha recaudado más que bien la primera parte.
Y sí, todo lo demás la convierte en una pelicula muy entretenida y eso que pensaba que Downey Jr. y Law no conjugarían demasiado bien. Me la he comido de lleno xD
PD: Sí, la vi hace bastante. Tengo que repasarme algunas pelis de este director.
PD2: Hágame el favor de reactivar su blog, leñes ya!!! xD ;)
eter. La verdad es que Holmes es un personaje tan sobado por cine, tv y literatura que han acabado trastocando su imagen xDD Hay una gran corriente que lo ven como si un lord inglés se tratara y tampoco era eso xD
Las exageraciones las veo en las explosiones, incluso en la más famosa de la pelicula que encima te la pasan a camara lenta. Y un poco en el Holmes de Robert Downey Jr. que al igual que Johnny Depp a veces sobreactuan un poco xD
Salu2! ;)
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